El semón de este domingo

Varias veces nuestro pastor ha preguntado: Porque hay una diferencia tan grande entre el domingo en la mañana y el lunes en la mañana? El domingo cerramos nuestros ojos, alzamos nuestras manos, cantamos y volvemos a nuestras casas resueltos a entregar nuestras vidas al Señor. Pero ya el lunes desde muy temprano abrimos nuestros ojos y empezamos a vivir a la manera de siempre, con nuestros mismos afanes, ansiedades, temores y deseos de logros personales y cosas materiales: casi todo se olvidó!

Cual es la principal causa de esto? Santiago 1 habla de esto. Un corazón distraído, un hombre que se mira en un espejo, se ve con todos sus defectos y se intranquiliza por un momento, pero al rato se olvida como si esto solucionara su problema. El hombre que habitualmente opera así nunca sera transformado. Debemos rumiar constantemente lo escuchado, mirar constantemente el estado de nuestra vida a la luz de los sermones que recibimos y ser hacedores eficaces, no oidores olvidadizos. Cual es un buen remedio para esto? Hablemos de estas cosas!

A partir de esta semana empezaremos a postear El sermón de esta semana. Entre el lunes y el miércoles publicaremos algunos apuntes y comentarios sobre lo que escuchamos el domingo. La idea es que tu comentes, hables, participes... des tu opinión sobre lo que piensas sobre lo predicado, animes y aconsejes a los demás y de esta forma traigas de nuevo a tu memoria lo que nunca debe salir de allí. Incluso puedes traer al post tus dudas o lo que no te haya quedado muy claro. La idea no es hacer un despliegue de conocimiento teológico, tampoco es entablar un debate: es, de nuevo, que hablemos de estas cosas. Todas las opiniones cuentan. Contamos contigo.

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