sábado, 30 de abril de 2011

La seguridad de la salvación


La intención de esta sección es aumentar tu conocimiento en asuntos de teología, historia y vida cristiana. Estaremos publicando algunas preguntas comunes pero la idea es que nos refieras tus preguntas, no importa si son muy elementales o si son muy complejas.


Pregunta: ¿Una vez que una persona es salva, es siempre salva?

Respuesta: Cuando alguien llega a conocer a Cristo como su Salvador, es introducido en una relación con Dios que garantiza una salvación eternamente segura. Numerosos pasajes de la Escritura declaran este hecho.

(a) Romanos 8:30 declara, “Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó”. Este versículo nos dice que desde el momento en que Dios nos escogió, es como si fuéramos glorificados, porque Dios ya lo tiene propuesto en el cielo. No hay nada que impida al creyente ser glorificado un día, porque Dios ya lo ha propuesto en el cielo. Una vez que una persona es justificada, su salvación está garantizada – está tan seguro como si ya estuviera glorificado en el cielo.

(b) En Romanos 8:33-34, Pablo hace dos preguntas cruciales, “¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros”. ¿Quién va a presentar cargos contra los elegidos de Dios? Nadie, porque Cristo es nuestro abogado. ¿Quién va a condenarnos? Nadie, porque Cristo, Aquel que murió por nosotros, es el que condena. Tenemos como nuestro Salvador al abogado y al juez.

(c) Los creyentes son nacidos de nuevo (regenerados) cuando creen (Juan 3:3; Tito 3:5). Porque un cristiano tendría que ser un empedernido para que pierda su salvación. La Biblia no da evidencia de que el nuevo nacimiento pueda ser quitado.

(d) El Espíritu Santo mora en todos los creyentes (Juan 14:17; Romanos 8:9) y bautiza a los creyentes en el cuerpo de Cristo (1ª Corintios 12:13). Para que un creyente se vuelva no salvo, el Espíritu Santo “no tendría que estar morando” en él, y tendría que estar desligado del Cuerpo de Cristo.

(e) Juan 3:15 declara que todo el que cree en Jesucristo “tiene vida eterna”. Si usted cree en Cristo hoy y tiene vida eterna, pero la pierde mañana, entonces ésta del todo nunca fue “eterna”. Por lo tanto, si pierde su salvación, las promesas de la vida eterna de la Biblia serían un error.

(f) Pienso que el argumento más decisivo, se encuentra en la Escritura misma “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro” (Romanos 8:38-39). Recuerde que el mismo Dios que le salvó, es el mismo Dios que lo va a guardar. Una vez que somos salvos, somos siempre salvos. ¡En definitiva, nuestra salvación es eternamente segura!

Tomado de gotquestions.org

Llevados a Cristo


Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.
Juan 6:44


Jesucristo es el que presenta a los hombres y a las mujeres a Dios. Aquellos a quienes Él lleva a la presencia del Padre todos tienen repugnancia de su pecado, deseo de ser perdonados y anhelo de conocer a Dios. Esas actitudes son la obra de Dios al llevarnos a Cristo. De modo que una respuesta al mensaje del evangelio comienza con un cambio de actitud hacia el pecado y hacia Dios.

Más allá de ese cambio inicial en la actitud está la transformación efectuada en cada creyente en el momento de la salvación. Cristo no murió solamente para pagar el castigo del pecad murió para transformarnos.

Abandonado por casi todos sus discípulos, Cristo sufría en las tinieblas y la agonía de la cruz mientras clamaba: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?" (Mt. 27:46). Esos fueron momentos en los que Jesús sintió gran rechazo y hostilidad. Pero por esas mismas circunstancias Cristo triunfó al expiar por el pecado y proporcionar una manera de que hombres y mujeres sean presentados a Dios y transformados. Era un triunfo que Él mismo pronto proclamaría (1 P. 3:19-20).

viernes, 29 de abril de 2011

Sufrimiento con propósito


Jesús entró por nosotros como precursor, hecho sumo sacerdote para siempre.
Hebreos 6:20


El propósito de Cristo al llevar nuestros pecados en la cruz y soportar las tinieblas de la muerte fue abrir el camino hacia Dios. El apóstol Pedro dijo que Cristo murió "para llevarnos a Dios" (1 P. 3:18). Dios mostró simbólicamente esa verdad al rasgar el velo del templo de arriba abajo, abriendo el lugar santísimo al acceso inmediato de todos los adoradores (Mt. 27:51). Como sacerdotes, todos los creyentes pueden entrar a la presencia de Dios (1 P. 2:9; He. 4:16).

El verbo griego traducido como "pueda llevarnos" (1 P. 3:18) expresa el propósito de la obra de Jesús. Se empleaba a menudo el verbo cuando se estaba presentando a alguien. La forma nominal de la palabra se refiere al que hace la presentación. En la época de Cristo, los funcionarios de las cortes antiguas controlaban el acceso al rey. Una vez que estaban convencidos del derecho de ese acceso de una persona, el funcionario llevaba a esa persona a la presencia del rey. Y esa es precisamente la función que Jesucristo desempeña por nosotros ahora. Como Él dij "Nadie llega al Padre sino por mí" (Jn. 14:6). Él vino para llevarnos a la presencia del Padre.

jueves, 28 de abril de 2011

Sufrimiento por los pecados


Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne.
Romanos 8:3


Cuando como creyentes sufrimos la persecución, la crítica o incluso la muerte, somos pecadores que sufren debido a los pecados de los demás. Nuestro dolor puede ser resultado de los pecados de odio, enojo, envidia o asesinato.

Cristo también sufrió por los pecados, pero como el inmaculado. Primera Pedro 2:22 dice que Él "no hizo pecado". Nunca pensó, dijo ni hizo nada malo. Más bien, todo lo que pensó, dijo e hizo fue perfectamente santo. Los pecados de los demás lo pusieron en la cruz: de quienes se burlaron de Él y de quienes lo clavaron en la cruz. Él murió por los pecados del mundo entero.

El versículo de hoy dice que Jesús murió "a causa del pecado". Él sufrió como ofrenda por el pecado porque "la paga del pecado es muerte" (Ro. 6:23). Así como en el Antiguo Testamento Dios exigía un sacrificio de animal para simbolizar la necesidad de nuestra expiación por el pecado, el Nuevo Testamento presenta a Cristo como el sacrificio que no solo proporcionó un símbolo, sino también la realidad de nuestra expiación eterna por el pecado.

miércoles, 27 de abril de 2011

El triunfo de Cristo


También Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios.
1 Pedro 3:18


Es increíble pensar que alguien que era perfectamente justo muriera por los injustos. Pilato tenía razón cuando dijo de Jesús: "Ningún delito hallo en este hombre" (Lc. 23:4). Las acusaciones presentadas contra nuestro Señor fueron inventadas. Los testigos fueron sobornados, y el fallo condenatorio era ilícito.

Pero Cristo triunfó en medio de ese injusto sufrimiento al llevarnos a Dios. Y aunque los creyentes nunca sufrirán como sustitutos ni redentores, Dios puede usar nuestra reacción cristiana ante el sufrimiento injusto para atraer a otros a Él.

Así que, cuando el Señor nos pida que suframos por su causa, debemos comprender que solo se nos pide que soportemos lo que Él mismo soportó de manera que podamos llevar a otros a Él.

martes, 26 de abril de 2011

Sus dos opciones


Porque mejor es que padezcáis haciendo el bien, si la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo el mal.
1 Pedro 3:17


Usted tiene dos opciones. La primera es hacer lo bueno, aun cuando resulte en sufrimiento. Entonces usted acepta el sufrimiento como parte del sabio y soberano plan de Dios para su vida.

La segunda es hacer lo malo, que también resultará en sufrimiento. Ambas opciones son posibles conforme a la voluntad de Dios. Dios quiere que usted sufra por hacer lo bueno para que reciba fortaleza espiritual y glorifique a Dios. Pero también quiere que usted sufra el castigo divino por hacer lo malo. Así que haga bien, y evite provocar sufrimiento en su propia vida por las razones equivocadas.

lunes, 25 de abril de 2011

Tranquilidad ante la crítica


Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados.
1 Pedro 4:14


Una buena conciencia da tranquilidad y lo vindica a usted cuando lo calumnian. Estará libre de la tarea de señalar cualquier pecado, y su vida demostrará que son falsas las críticas. Cuando usted tiene una buena conciencia, el maltrato verbal y los insultos contra usted avergüenzan a su acusador, no a usted.

El mundo condena hipócritamente al cristianismo cuando puede señalar a un cristiano que haya desacreditado la fe. A los incrédulos les encanta señalar a un cristiano que peca para justificar así su propia conducta pecaminosa. Por lo tanto, viva sin tacha para que las acusaciones de los incrédulos no tengan fundamento alguno.

domingo, 24 de abril de 2011

Una buena conciencia


Teniendo buena conciencia, para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, sean avergonzados los que calumnian vuestra buena conducta en Cristo.
1 Pedro 3:16


La conciencia acusa o excusa a una persona, obrando como fuente de convicción o afirmación. Una buena conciencia no acusa a un creyente de pecado porque está llevando una vida de santidad. Más bien, una buena conciencia confirma que todo anda bien, mientras que una mala conciencia indica pecado.

Un creyente debe vivir con la conciencia tranquila para que el peso de la culpa no lo abrume cuando se enfrenta a la crítica hostil. Sin embargo, si no tiene pasión por hacer el bien y servir a Cristo, conocerá el tremendo peso del merecido sentido de culpa. Una conciencia manchada no puede estar tranquila ni soportar el ataque furioso de las pruebas. Pero una conciencia tranquila lo ayudará a no estar ansioso ni atribulado durante sus pruebas.

sábado, 23 de abril de 2011

Una amable respuesta


El siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos.
2 Timoteo 2:24


Un cristiano debe explicar su fe "con mansedumbre y reverencia" (1 P. 3:15). Esto indica un espíritu sensible y generoso en la conversación. El temor que debemos tener es una sana devoción a Dios, un gran interés por la verdad y un considerable respeto por la persona con la que hablamos. Por eso no se puede ser contencioso cuando se defiende la fe.

Un cristiano que no puede dar una explicación clara, razonable y bíblica de su fe se sentirá inseguro cuando afronte la hostilidad y pudiera inclinarse a dudar de su salvación. El golpe del enemigo destruirá a quienes no estén vestidos con "la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo" (1 Ts. 5:8).

viernes, 22 de abril de 2011

Citas


¿Para qué creó Dios el universo? Para aquel viernes santo.
El universo fue creado para la glorificación de la gracia de Dios en el Calvario.
Desde la eternidad Dios estableció que la razón última para Él crear el universo sería la revelación de Su gloria. Esa gloria sería manifestada eminentemente en la gracia de Dios. Y esta gracia sería eminentemente glorificada en Jesús. Y el punto cúspide de esa glorificación en Jesús sería alcanzado el dia que fuera clavado en una cruz para salvar a un pueblo que pasaría la eternidad magnificando la grandeza de esa gracia.

Citas


¿Puedes bendecir a Dios en la aflicción? ¿Puedes sumergirte con el pesado equipo que cargas y nadar a través de las corrientes de las pruebas? ¿Puedes marchar triunfante en el escondrijo del león, reírte de la aflicción y ofrecer un desafío... al infierno? ¿Puedes hacer esto? ¿No? Pues tu evangelio es afeminado; es una cosa de palabras y sonidos y no de poder. Arrójalo lejos de ti, te lo imploro. No vale la pena que lo conserves pues cuando te presentes ante el trono de Dios, descubrirás que te fallará y ya no podras encontrar otro; pues perdido, arruinado, destruido, te darás cuenta que Cristo que ahora es skandalon, "tropezadero", entonces será tu Juez.

Defensa de la fe


Estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros.
1 Pedro 3:15


Cuando la sociedad ataca, hay que estar preparado para hacer una defensa. El término griego para "defensa" a menudo se refería a una defensa formal en un juzgado. Pero Pablo también empleó la palabra para describir su capacidad de responder a cualquiera que le preguntara; no solo un juez, un magistrado o un gobernador (Fil. 1:16-17). Además, la inclusión de la palabra siempre en el versículo de hoy indica que hay que estar preparado para responder en todas las situaciones y no solo en la esfera jurídica.

Sea en el ámbito oficial o de manera informal a cualquiera que pregunte, usted tiene que estar preparado para dar una respuesta acerca de "la esperanza que hay en vosotros" (1 P. 3:15), es decir, dar una descripción de su fe cristiana. Debe estar preparado para dar una explicación racional de su salvación.

jueves, 21 de abril de 2011

Devoción a Cristo


Santificad a Dios el Señor en vuestros corazones.
1 Pedro 3:15


A pesar de la oposición a la que pueda enfrentarse el creyente en este mundo, siempre debe afirmar en su corazón que Cristo es Señor. Debe aceptar y reconocer la soberanía y majestad del Señor, temiendo solo a Él.

El creyente que santifica a Cristo lo exalta como el objeto de su amor y su lealtad. Reconoce su perfección, ensalza su gloria y exalta su grandeza. Se somete a la voluntad de Dios, comprendiendo que su voluntad a veces implica sufrimiento. Vivir de esa manera es adornar en todo "la doctrina de Dios nuestro Salvador" (Tit. 2:10).

Como cristiano, tiene que consagrarse a honrar a Cristo como Señor, aun en medio del sufrimiento. La sumisión a Él le dará valor y fortaleza en medio de la hostilidad.

miércoles, 20 de abril de 2011

Citas


La inteligencia del hombre tiene un límite. Su estupidez no.

Un temor que ayuda


Ni temáis lo que ellos temen, ni tengáis miedo. A Jehová de los ejércitos, a él santificad; sea él vuestro temor, y él sea vuestro miedo.
Isaías 8:12-13


En la época del profeta Isaías, Acaz rey de Judá se enfrentó a una crisis en la inminente invasión del ejército asirio. Cuando Acaz se negó a hacer alianza con los reyes de Israel y Siria contra Asiria, también amenazaron con invadir Judá. Entre bastidores Acaz se había aliado con Asiria. Isaías advirtió a Acaz contra esa alianza impía, pero le dijo que no temiera. El rey solamente debía temer al Señor y no preocuparse.

En igual sentido, un cristiano no ha de estremecerse por ninguna hostilidad que lo amenace. El temor al Señor lo ayudará a afrontar con valor la oposición y a ver el sufrimiento como una oportunidad de bendiciones espirituales, no como una oportunidad de comprometer su fe delante del mundo que cree.

Consagrarse al Señor ante la persecución exige que la mente y los afectos se concentren en los valores eternos, no en los terrenales. Si usted se preocupa por los bienes, los placeres y la popularidad, temerá los ataques del enemigo. Pero si tiene puesta su mirada en el cielo, se regocijará cuando tenga que pasar por pruebas.

martes, 19 de abril de 2011

No dé motivo alguno


Si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois.
1 Pedro 3:14


No es probable pero, según el apóstol Pedro, hay una remota posibilidad de que usted sufra por ser justo. En realidad, muchos cristianos sufrieron por su obediencia a Cristo en la iglesia primitiva, pero otros sufrieron por su desobediencia. Cuando un cristiano desobedece la Palabra de Dios, el mundo siente una mayor justificación y una mayor libertad para la hostilidad. Ni los cristianos consagrados deben sorprenderse ni temer cuando el mundo los trata con hostilidad.

La pasión por hacer el bien no es ninguna garantía contra la persecución. El hacer lo bueno reduce esa probabilidad. Nadie hizo más bien que Jesús, pero un mundo adverso finalmente lo mató. No obstante, usted debe vivir de modo que los críticos no tengan justificación alguna para acusarlo de nada.

Citas


Nunca serás muy pequeño para ser usado por Dios. Muy grande sí.

lunes, 18 de abril de 2011

Citas


Sin el evangelio todo es vano e inútil. Sin el evangelio no somos cristianos. Sin el evangelio todas las riquezas son pobrezas, toda sabiduría locura ante Dios, la fortaleza es debilidad y toda la justicia del hombre está bajo condenación de Dios.
Pero por el conocimiento del evangelio somos hechos hijos de Dios, hermanos de Jesucristo, cuidadanos junto con los santos, ciudadanos del Reino de los Cielos, herederos de Dios en Cristo, por quien el pobre es hecho rico, el débil hecho fuerte, los tontos hechos sabios, los pecadores justificados, el desolado confortado, el que duda es asegurado y los esclavos son libres. El evangelio es la Palabra de vida.

(Gracias, Pedro)

Pasión por hacer el bien


¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien?
1 Pedro 3:13


A la mayoría de las personas les resulta difícil maltratar a quienes son fervientes en hacer el bien. Aquellos a quienes les encanta hacer el bien a menudo son generosos, desinteresados, bondadosos, amorosos y atentos. Pero no se tolera a los engañadores que roban a las viudas y a los huérfanos. Aun los inconversos condenan a quienes se hacen ricos a expensas de los demás.

Una persona que es generosa y atenta con los demás por lo general no es objeto de hostilidad. Eso es lo que quiere decir Pedro en el versículo de hoy. Pedro quería que todos sus lectores procuraran fervorosamente hacer el bien. La pasión por hacer el bien resulta en una vida limpia, que debe ser la meta y el deleite de todo creyente. Cuando se está apasionado por la vida espiritual, se pierde cualquier apetito por las atracciones profanas del mundo.

domingo, 17 de abril de 2011

Citas


Si la tumba está vacía, el Espíritu Santo ha sido derramado, y el evangelio es poder de Dios, entonces la mayoría de nosotros estamos pidiendo muy poco, arriesgando muy poco, haciendo muy poco y logrando muy poco.

Cómo vivir en un mundo adverso


Manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.
1 Pedro 2:12


Tal vez no lo haya comprendido antes, pero vivir como cristiano en este mundo es como ser extranjero sin hogar ni ciudadanía permanente. El apóstol Pedro se refirió a los creyentes como "extranjeros y peregrinos" (1 P. 2:11). Usted debe considerarse un ciudadano temporal y abstenerse de participar en la maldad del mundo.

Esa es una perspectiva importante que debe mantenerse mientras aumenta la hostilidad hacia el cristianismo en nuestra sociedad. Muchos incrédulos consideran la inmoralidad como un estilo de vida alternativo y creen que el hombre puede resolver sus problemas de la manera que le parezca.

Para vivir en tal sociedad, tiene que armarse de una confianza en el poder de la justicia a fin de triunfar sobre la persecución y el sufrimiento. Durante tiempos de hostilidad, usted debe tener confianza y no quedar atrapado en la confusión.

sábado, 16 de abril de 2011

Vencedores en el sufrimiento


Ellos [han vencido a Satanás] por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.
Apocalipsis 12:11


El versículo de hoy es una alusión de Pedro a Isaías 53:6, que dice: "Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros". Si el Señor hubiera provisto un sacrificio por el pecado, nunca nos habría podido llevar a su redil.

La tarea de un pastor es cuidar ovejas. El término griego para "Pastor" en 1 Pedro 2:25, junto con la palabra traducida como "Obispo", describe las responsabilidades de los ancianos (cp. 1 P. 5:2). Jesucristo cuida, vigila y guía a su rebaño. Él dijo "El buen pastor su vida da por las ovejas" (Jn. 10:11). Eso es precisamente lo que hizo para llevarnos a sí mismo.

viernes, 15 de abril de 2011

Citas


Nuestro mayor temor en la vida no debería ser el fracasar, sino el tener éxito en las cosas que realmente no tienen importancia.

Cristo nuestro pastor


Vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas.
1 Pedro 2:25


El versículo de hoy es una alusión de Pedro a Isaías 53:6, que dice: "Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros". Si el Señor hubiera provisto un sacrificio por el pecado, nunca nos habría podido llevar a su redil.

La tarea de un pastor es cuidar ovejas. El término griego para "Pastor" en 1 Pedro 2:25, junto con la palabra traducida como "Obispo", describe las responsabilidades de los ancianos (cp. 1 P. 5:2). Jesucristo cuida, vigila y guía a su rebaño. Él dij "El buen pastor su vida da por las ovejas" (Jn. 10:11). Eso es precisamente lo que hizo para llevarnos a sí mismo.

jueves, 14 de abril de 2011

Santificado sea tu nombre


¿Porqué Dios le da tanta importancia a Su nombre? En los 10 mandamientos Él se preocupa porque Su nombre no sea tomado en vano. En Deu 6:13 ordena que sólo en Su nombre se debe jurar. Yaweh es el nombre propio de Dios según Él mismo lo reveló. La reputación de una persona está ligada al nombre de esa persona. El nombre es lo primero que debo tener en cuenta para establecer una relación con una persona. Cada uno de los nombres de Dios me revela algo sobre Él:
Yaweh: El Dios Autosuficiente. Elohim: El Dios Creador. El Shaddai: El Dios Todopoderoso. El Elyon: El Dios Altísimo. El Olam: El Dios Eterno.
¿Porqué Cristo incluyó esta petición en la oración modelo? Ciertamente no es para recordarle o pedirle a Dios que lo haga, sino para recordárnoslo a nosotros y que sepamos que ninguna de nuestras peticiones será escuchada si no estamos dispuestos a santificar Su nombre. Pero ¿qué significa santificar Su nombre? Significa honrarlo y respetarlo en palabras y en hechos delante de los demás. A nuestros padres terrenales les importa mucho lo que hacemos pues con ello les honramos o le deshonramos: cuánto más le importará a Dios, nuestro Padre celestial. Deshonramos Su nombre cuando nuestras acciones pecaminosas llevan al inconverso a hablar mal de nuestro Dios (“y eso, que dizque es cristiano”, “Yo no se qué clase de cristiano es este”). Dios se toma esto muy en serio. Natán le dijo a David:
"por cuanto con este hecho has dado ocasión de blasfemar a los enemigos de Yaweh, ciertamente morirá el niño" 2Sam 12:14 . Deshonramos Su nombre cuando le llamamos “Señor, Señor” y luego no hacemos lo que El dice. Le deshonramos cuando hablamos “en Su nombre” y Él no ha hablado. “Dios te manda a decir” y Él no ha dicho nada. “Así dice el Señor” y Él no ha dicho eso. Y cuando usamos ese nombre para beneficio particular, como hacen los mercaderes del evangelio. También cuando nos bautizamos y ni siquiera cristianos somos. Y profanamos Su nombre cuando tomamos la cena del Señor indignamente, por eso algunos murieron y otros fueron debilitados.

¿Como santifica Dios Su nombre? Ha dejado evidencia de esto? La santificación de Su
nombre es algo en lo que el pueblo de Dios históricamente no se ha ocupado mucho. 2Cr 7:14: “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra”. Y al final del AT cuando Israel no respondió a los profetas que Dios les envió, Él los envió al destierro. Dios dice:
"Cuando llegaron a las naciones adonde fueron, profanaron mi santo nombre, porque de ellos se decía: Estos son el pueblo del SEÑOR, y han salido de su tierra". (Nota la relación entre la situación de Su pueblo y la reputación del nombre de Dios). "Pero yo he tenido compasión de mi santo nombre, que la casa de Israel había profanado entre las naciones adonde fueron. Por tanto, di a la casa de Israel: "Así dice el Señor Dios: 'No es por vosotros, casa de Israel, que voy a actuar, sino por mi santo nombre, que habéis profanado entre las naciones adonde fuisteis. 'Vindicaré la santidad de mi gran nombre profanado entre las naciones, el cual vosotros habéis profanado en medio de ellas. Entonces las naciones sabrán que yo soy el Yaweh' declara el Señor Dios 'cuando demuestre mi santidad entre vosotros a la vista de ellas". Eze 36: 20-23. Las naciones verán quién es Yaweh cuando Él tome a Su pueblo, le pase justicia y limpie Su nombre a la vista de ellos.

Las consecuencias que Dios trae sobre Su pueblo es la manera que Él reivindica Su nombre. Él nunca deja su nombre embarrado. Debemos retomar la sensibilidad hacia la santidad de Su nombre. No es sólo que Él lo merece sino que a nosotros nos conviene. Los discípulos no sabían orar y le dicen
"Señor, enséñanos a orar” y Él les dice “Cuando oréis, decid: Padre, santificado sea tu nombre".

¡Nuestras oraciones de hoy son tan diferentes a las de los hombres de Dios del pasado! Nosotros oramos: “Señor perdona mi pecado, pero es que mi esposa me saca de quicio” mientras David dice:
“Oh Señor, por amor de tu nombre, perdona mi iniquidad, porque es grande” Sal 25:11. David no pide que le perdone en base a las circunstancias atenuantes sino por amor a Su nombre. Nosotros: “Sácame de aquí Señor, ya no puedo mas” pero Daniel pide "¡Oh Señor, escucha! ¡Señor, perdona! ¡Señor, atiende y actúa! ¡No tardes, por amor de ti mismo, Dios mío! Porque tu nombre se invoca sobre tu ciudad y sobre tu pueblo” Dan 9:19. Daniel no dice que lo haga por amor a Su pueblo sino por amor a Su nombre. Esos hombres sí sabían orar. Nosotros no, por eso es la petición: enséñanos a orar... porque no sabemos. Estamos tan centrados en nosotros mismos que creemos que la oración es para nosotros en primer lugar. El propósito principal es que yo aprenda como honrar Su nombre sobre toda la tierra.

La transformación


Así también nosotros andemos en vida nueva.
Romanos 6:4


El propósito del sacrificio expiatorio de Cristo fue que "nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia" (1 P. 2:24). Pedro no dice que Cristo murió para que pudiéramos ir al cielo, tener paz o experimentar el amor. Él murió para efectuar una transformación: Hacer santos de pecadores. La obra expiatoria de Cristo permite que una persona se aparte del pecado y que entre en una nueva forma de vida: Una vida de justicia.

El apóstol Pablo dijo "Nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado" (Ro. 6:6). Hemos muerto al pecado, de modo que ya no tiene poder sobre nosotros. Primera Pedro 2:24 repite ese pensamient nuestra identificación con Cristo en su muerte es un abandono del pecado y una nueva dirección en la vida.

miércoles, 13 de abril de 2011

Citas

El creyente más débil y el santo mas fuerte son igualmente justificados. La justificación no tiene grados. Un hombre es o totalmente justificado o totalmente condenado a los ojos de Dios.

El peso de nuestro castigo


Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos.
Hebreos 9:28


Cuando el apóstol Pedro dijo que Cristo "llevó" nuestros pecados (1 P. 2:24), empleó un término que significa "llevar una carga muy pesada". Eso es el pecado. Es tan pesado que Romanos 8:22 dice: "Toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto" bajo su peso. Solo Jesucristo pudo quitarnos semejante peso.

Cuando Cristo "llevó nuestros pecados", llevó el castigo de nuestros pecados. Él sufrió la muerte física y espiritual. Cuando Jesús clamó en la cruz "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?" (Mt. 27:46), el suyo fue el grito de muerte espiritual. Ese era el castigo de llevar nuestros pecados.

martes, 12 de abril de 2011

Citas


Cuando los israelitas atravesaron el Mar Rojo teniendo la pared de agua a su izquierda y a su derecha, muchos cruzaron diciendo "voy a morir, voy a a morir!". Todos ellos caminaron con diferentes calidades de fe pero todos fueron igualmente salvos.
Tú no eres salvo por la calidad de tu fe, sino por el Objeto de tu fe.

...

Cuando Jonás estuvo en el barco, le dijo a los marineros: "tírenme al mar y serán salvados". Jesús tuvo la valentía de decir "Uno mas grande que Jonás está aquí". Y fue arrojado al océano de la ira de Dios por nosotros.


en la Conferencia de The Gospel Coalition, hace un rato.

Citas


Jesucristo... es el León de Judá (Apocalipsis 5:5) y el Cordero de Dios (Apocalipsis 5:6). Él tuvo el corazón de león y actuaba como cordero, fuerte y humilde, duro y tierno, emprendedor y sensible, enérgico y quebrantado de corazón.
Él estableció el modelo de la masculinidad.

Nuestro sustituto


Llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.
1 Pedro 2:24


La muerte expiatoria de Jesucristo es una verdad fundamental de la fe cristiana. La redención, la justificación, la reconciliación, la eliminación del pecado y la propiciación son todos resultados de la obra expiatoria de Cristo.

El apóstol Pablo también destacó esa obra cuando dijo que Dios "al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él" (2 Co. 5:21), y que "Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición" (Gá. 3:13).

Algunos sostienen que es inmoral enseñar que Dios tomó forma humana y llevó los pecados de hombres y mujeres en su lugar. Dicen que es injusto transferir el castigo del pecado de un culpable a un inocente. Pero eso no es lo que sucedió. Cristo tomó voluntariamente nuestro pecado y llevó su castigo. Si no hubiera estado dispuesto a tomar nuestro pecado y aceptar su castigo, como pecadores nosotros hubiéramos llevado el castigo del pecado en el infierno para siempre. La obra de Cristo en la cruz no fue injusta; ¡fue el amor de Dios puesto en práctica!

lunes, 11 de abril de 2011

Vindicados


Señor, no les tomes en cuenta este pecado.
Hechos 7:60


Vivimos en una época en la que el cristianismo se ha vuelto cada vez más impopular con la sociedad secular. La defensa de la verdad de las Escrituras y del mensaje del evangelio pudiera pronto volverse intolerable. Eso resultará en el trato injusto de los cristianos.

La posibilidad de semejante trato debe llevarnos a pasajes como 1 Pedro 2:21-25. Allí aprendemos que, al igual que nuestro Señor, debemos andar por la senda del sufrimiento para alcanzar la gloria de recompensa y exaltación en el futuro. Esa comprensión de seguro llevó a Esteban a poner su mirada en Jesucristo en gloria y a pedirle a Dios que perdonara a quienes lo asesinaban (Hch. 7:54-60). Se encomendó a Dios, sabiendo que Él lo vindicaría. Si usted hace lo mismo, Dios también lo vindicará.

domingo, 10 de abril de 2011

Aprendí


Una de las mayores luchas que se nos presentan a los hombres cuando venimos al Señor, sucede al ser confrontados en nuestros roles de esposo, padre, hijo, profesional, etc.

Resulta asombroso como hemos sido programados para consciente o inconscientemente andar en la vida con una meta prioritaria y a veces única: Alcanzar el éxito. Éxito económico, emocional, físico, profesional, etc.

Un éxito basado en los estándares de este mundo, enseñado y reforzado por los medios de comunicación y nuestro sistema de consumo, pero sobre todo ponderado con la herramienta de medición preferida por el diablo: los ojos… la apariencia, la imagen.

En mi caso, como a muchos de ustedes, el Señor empezó a trabajar en mí, desde el momento en que le mostré mi deseo de querer agradarle, obedecerle y rendir ante El hasta mis pensamientos.

Me sentí atrapado en un molde de apariencia como Saúl. Enfrentado a un Dios del cual estaba aprendiendo que no miraba como el hombre ve, que no mira la apariencia exterior, sino que mira nuestro corazón. Pero a diferencia de Saúl, no me sentí rechazado por este Dios, ni acusado por Su profeta, sino que en Su gracia he tenido la oportunidad de iniciar un proceso de desaprendizaje.. de cambio de molde, que me llevará a ser digno de que mi Dios pudiera ver mi corazón.

Sé que este proceso nunca acabará de este lado de la Gloria… pero en la Gracia del Señor pretendo sentarme cada día en un pupitre del aula del Señor y oir Sus enseñanzas:

Aprendí que las palabras más sencillas para llamar a la autoestima, autosuficiencia y deseo de superación son el ORGULLO y la VANAGLORIA.

Aprendí que Moisés tuvo que vivir 40 años como sirviente y mantenido de su suegro, para poder desaprender todos sus conceptos de liderazgo egipcio para que entonces el Señor pudiera convertirlo en un verdadero pastor de almas.

Aprendí lo que es estar diligentemente quieto!

Aprendí que la obediencia es la llave que abre el cofre que contiene las más maravillosas promesas de Dios.

Aprendí que mientras más cerca estoy de mi Dios, más claro puedo oir Su voz.

Aprendí que el hijo busca más fácil al padre cuando tiene problemas y sufrimientos que cuando se siente seguro y en paz.

Aprendí que se puede estar gozoso y a la vez triste.
Aprendí que la paz de Dios puede guardar mi corazón aunque mis problemas no desaparezcan.

Aprendí que es más beneficioso para mi salud compartir una grasosa pizza en compañía de mis hijos, que una ensalada de un restaurant gourmet sin ellos.

Aprendí que son más provechosas las calorías que se queman aparando con mi hijo de 8 años que trotando en la caminadora de un gimnasio.

Aprendí que mi esposa agradece mucho más, mi disposición a ayudarla en la casa, que un fastuoso arreglo de flores entregado delante de sus compañeras de oficina.

Aprendí que no me hace menos hombre que mi esposa sepa donde estoy a cualquier hora del día o de la noche.

Aprendí que soy valiente ante el Señor… cuando huyo del pecado.

Aprendí que mi esposa no tiene mis mismos gustos y necesidades…

Aprendí que mis empleados tampoco tienen mis mismos gustos ni necesidades. Y que la mayoría de las veces, las virtudes de ser exigente, recto e intachable son disfraces del pecado de falta de misericordia.

Aprendí que mis empleados los puso Dios en mi oficina, no para hacerla más productiva, sino primordialmente para que yo ministrara en sus corazones y ellos en el mio.

Aprendí que todo cuanto soy y tengo… lo soy y tengo a pesar de mi y mi pecado, sólo por Su gracia. Y que poner mi confianza en inteligencia, propiedades, seguros, relaciones, familia, es tan abominable para Dios como la idolatría del más pagano de los hechiceros.

Aprendí que no me hace menos papá pedir perdón a mi hijo de 14 años al darme cuenta que lo ofendí con una disciplina mal implementada.

Aprendí que el sistema educativo de Dios, es totalmente inverso al del mundo: Iniciamos como estudiantes universitarios que creen que saben mucho, quizás más que su maestro.
A medida que avanzamos, somos como el estudiante de 7mo y 8vo, que reconoce que no lo sabe todo y que su profesor es quién le puede enseñar. Estaremos más cerca de haber aprendido nuestros roles en esta vida cuando nos sintamos como niños preescolares, que necesitan y anhelan que su maestro se siente a su lado y los tome de la mano para caminar.

Aprendí que la meta en nuestra vida debe ser vivir en plena dependencia de Dios.

Reynaldo Logroño

Deje que Dios lo resuelva


Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.
Lucas 23:46


El apóstol Pedro les dijo a los cristianos que no devolvieran "mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo" (1 P. 3:9). Esa fue la actitud de Jesús. Él pudo hacerlo porque "encomendaba la causa al que juzga justamente" (2:23). La palabra traducida como "encomendaba" significa "entregar a alguien para que se ocupe de eso". En cada ocasión de sufrimiento, nuestro Señor entregó la circunstancia y se entregó a sí mismo a Dios. Era porque tenía confianza en el justo juicio de Dios y la gloria que sería suya. Esa confianza le permitió aceptar con serenidad tan grande sufrimiento.

Esa es la manera en la que usted debe reaccionar cuando se enfrenta a una persecución injusta en el trabajo, en su familia o en otras relaciones. Cuando usted se venga, se pierde la bendición y la recompensa que ha de traer el sufrimiento. La venganza muestra que le falta la confianza que debe tener en el poder de Dios para resolver las cosas a su debido tiempo, que incluirá castigar a los injustos y recompensar a quienes son fieles en el sufrimiento. Así que entréguele eso a Dios y deje que Él lo resuelva

sábado, 9 de abril de 2011

Citas


Nunca estés satisfecho con lo que conoces del evangelio. El evangelio es la verdad que permea vida, que altera el mundo y que cambia el universo. Tiene mas facetas que un diamante. El hombre jamas podra sondear sus profundidades.

No amenace


Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.
Lucas 23:34


Jesús "no amenazaba" a pesar de un increíble sufrimiento (1 P. 2:23). Lo escupieron, le tiraron de la barba, le pusieron en la cabeza una corona de espinas y atravesaron con clavos su carne para asegurar su cuerpo a una cruz. En cualquier otra persona, semejante tratamiento injusto habría provocado sentimientos de venganza, pero no en Cristo. Él era el Hijo de Dios, Creador y Sustentador del universo, santo e inmaculado, con el poder de enviar a quienes lo atormentaban al fuego eterno.

Pero Jesús nunca amenazó a sus verdugos con juicio inminente; más bien los perdonó. Cristo murió por los pecadores, incluso por quienes lo perseguían. Sabía que la gloria de la salvación podía alcanzarse solamente por la senda del sufrimiento, de modo que aceptó su sufrimiento sin amargura, sin enojo y sin espíritu de venganza. Que pueda reaccionar usted de igual modo ante su propio sufrimiento.

viernes, 8 de abril de 2011

Todos los hombres


La reunión de hombro con Hombro de este sábado es para todos los hombres que asisten a la IBI, sean miembros o no. Mas aún, si quieren invitar otros hombres, no hay ningún problema. La única limitación es que sean mayores de 18 años. Así que... sin excusas.

Vamos arriba!



Bueno, luego de casi seis meses de vacaciones arrancamos de nuevo con VaronilMente. Nuevo diseño y nuevos ánimos. Este será el medio por el cual te mantendremos informado de lo que sucede en HCH. Pero también publicaremos aquí informaciones, estudios y comentarios sobre temas que tienen que ver con la fe de Cristo, así como un resumen del sermón de la IBI de cada domingo y un devocional diario del pastor John MacArthur. Una lectura ligera pero con sustancia.
Pero en especial nos interesa lo que piensas. Por eso en cada tema tienes la oportunidad de compartir tu opinión con todos nosotros.
Has de VaronilMente tu parada de cada día en la web.